Aruba

Estas tres islas caribeñas ofrecen playas de arena blanca, submarinismo de calidad y una enigmática influencia holandesa en la comida, el idioma y su arquitectura colonial.

Las tres minúsculas islas, que pertenecieron a las Antillas Holandesas, siguen siendo territorios independientes en el seno de los Países Bajos, por lo que la cultura holandesa está muy presente.

Aruba es la isla más turística del sur del Caribe por sus numerosas playas, sus acogedores locales de ron, sus resorts de lujo y su bonita capital. El atractivo de Bonaire es su costa repleta de corales y sus hermosas aguas, que atraen a submarinistas del mundo entero. La dinámica Curazao combina el comercio con la vieja Willemstad, reconocida por la Unesco, y playas recoletas por toda la exuberante costa. Es una fiera combinación de locura urbana, vistas panorámicas y ganas de vivir.

Eagle Beach

Esta franja de arena fina al noroeste de Oranjestad es la mejor playa de Aruba y suele figurar entre las mejores del mundo. Vendedores, tumbonas y la sombra de los árboles invitan a la relajación.

Parque Nacional Marino de Bonaire

Patrimonio Mundial de la Unesco, ocupa todo el litoral de Bonaire y, con una profundidad de hasta 60 m y más de 90 zonas clasificadas, la mitad accesibles desde la orilla.

Willemstad

El canal de Sint Annabaai divide en dos esta atrayente ciudad y crea uno de los grandes puertos del mundo. Se puede pasear por los barrios coloniales viendo pasar los enormes cargueros a pocos metros.